Residuos electrónicos: una amenaza creciente que exige acción conjunta

“Estos aparatos alguna vez fueron útiles en nuestros hogares y oficinas, pero cuando dejan de funcionar o ya no tienen repuestos, se convierten en RAEE. El problema es que no siempre se gestionan de manera adecuada”, explicó.
De acuerdo con el Global E-Waste Monitor, en 2019 se generaron alrededor de 56,3 millones de toneladas de RAE en el planeta. Para 2022, la cifra ascendió a 62 millones de toneladas, consolidándose como uno de los flujos de desechos de mayor crecimiento a nivel internacional.
La investigadora señaló que la disposición inadecuada de estos residuos —ya sea en botaderos, carreteras o entregados a recolectores informales— representa un riesgo significativo, pues puede liberar metales pesados y sustancias tóxicas como plomo, mercurio o retardantes de llama. Estos contaminantes afectan el aire, el suelo y el agua, con consecuencias directas para la salud y el ambiente.
No obstante, enfatizó también la oportunidad de recuperación que representan los RAEE: “Muchos de sus componentes, como plásticos y metales, pueden reaprovecharse en nuevos procesos productivos, reduciendo la presión sobre la extracción de materias primas”.
El PROSIC-UCR subraya la necesidad de avanzar hacia una gestión responsable de los residuos electrónicos, involucrando a la ciudadanía, las empresas y las instituciones, de manera que se transforme un problema ambiental en un recurso para la economía circular.
Fecha: Lunes 22 Septiembre 2025- 10:00 am
Lugar de la actividad: Radio 870 AM UCR